De 1990 dirigida por David Lynch; una película diferente a las que habíamos visto antes en clase, pero muy rescatable. Al ser dirigida y actuada por norteamericanos pareciera garantizar una proyección totalmente comercial y típicamente hoollywoodense pero en lugar de eso hayamos una historia un tanto perturbadora, surrealista, dramática y cruda pero sumamente interesante tanto por la dirección como por la historia misma.
El manejo de tomas mezclado con el género de la música a alto volumen le dan un enfoque más dramático que te acelera el ritmo cardiaco.
Es protagonizada por una pareja que a mi parecer son mentalmente inestables; Lula y Sailor la historia comienza cuando él sale de la cárcel y busca a Lula para emprender un viaje juntos, pero su madre se opone totalmente a esta relación y contrata a un asesino a sueldo para seguirlos y deshacerse de Sailor y es ahí donde comienza la aventura.
En mi opinión mientras se va desarrollando ese viaje bizarro y caótico se asoma un trasfondo muy diferente a lo que se ve superficialmente; dentro de esa relación que parece cien por ciento sexual, existe un amor profundo, sincero y hasta incondicional entre dos personas que parecen no tener ningún sentido para vivir si es que no notas que el sentido de sus vidas es ese amor, la complicidad y la co-dependecia que hay entre ellos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario